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Por Luis Rubén Maldonado Alvídrez
Por Luis Rubén Maldonado Alvídrez

 

El pasado 7 de junio mexicanos de 9 estados fueron a votar para renovar su poder ejecutivo local. Todos los análisis hechos hablan del porcentaje de votación, segmentación del electorado; que si los jóvenes votaron, que si las mujeres no votaron por mujeres, etc.

 

Pero, ¿qué perfil es el que gustó más en cada una de las entidades donde se alzaron con el triunfo los que tendrán en sus manos el destino de sus paisanos?

 

Sí. Fue la elección de las mujeres. Y hoy ocupan 42% de la Cámara de Diputados. La mitad fueron candidatas, pero no todas ganaron. Un debate que tenían los partidos políticos al postular candidatos a gobernador, era el de juventud contra madurez.

 

Un caso tratado previamente en este espacio es el de Nuevo León. Todo apuntaba a que el PAN tendría a una mujer joven, enérgica y atractiva de candidata al gobierno en la figura de Margarita Arellanes. Sin embargo la militancia neoleonesa se del entonces diputado federal Felipe de Jesús Cantú de 49 años de edad al momento de la elección.  El PRI se había decidido por una joven senadora de 37 años como su abanderada; mientras que el priísta renegado Jaime Rodríguez “El Bronco” de 57 años, se lanzó como candidato independiente y obtuvo el triunfo de manera contundente, mermando la votación priísta en 42%.

 

En Nuevo León el electorado no fue convencido por los perfiles jóvenes del PRI y del PAN y decidió por la madurez.

 

Siguiendo con los casos norteños, en Baja California Sur la pelea se dio entre el priísta Ricardo Barroso y el panista Carlos Mendoza Davis. El candidato tricolor hacía su segunda aparición como candidato a la gubernatura con sólo 35 años; el panista hacia su debut como candidato a los 46 años edad. Ambos fueron compañeros en el senado en la actual legislatura; el PRI optó por una cara conocida, joven y con trayectoria de partido, mientras que el PAN una carta más madura y fresca.

 

En este estado de paradisíacas playas, el electorado prefirió la madurez sobre la juventud.

 

Nuestro vecino estado de Sonora, que en 2009 rompiera la hegemonía priísta, consolidaba el triángulo del Mar de Cortés, como una zona gobernada enteramente por el PAN. Dicho partido optó por una carta madura y de gran prestigio social: Javier Gándara Magaña de 70 años, empresario y ex alcalde de Hermosillo.

 

El PRI se decidió por una joven mujer de 45 años al momento de ser candidata: Claudia Pavlovich. Un perfil arriesgado del partido color bandera, que por vez primera se decidía por una mujer. Y el otrora partido invencible, se alzó con el triunfo: en Sonora la juventud de la priísta, derrotó a la madurez panista.

 

Una de las contiendas más cerradas del 7 de junio en gubernaturas fue la de San Luis Potosí. Allá, el PAN se decidió por un perfil como el de Claudia Pavlovich: mujer de 46 años y senadora por su estado.

 

Mientras que el PRI se decidió por Juan Manuel Carreras de 53 años de edad y miembro del gabinete de su compañero de partido, el Dr. Fernando Toranzo. En tierra potosina, la contienda estuvo muy cerrada, pero al final la mayoría del electorado decidió por 28,776 votos por la experiencia y madurez del priísta.

 

En Querétaro, que en 2009 había sido seducido por la juventud del priísta José Calzada, el PAN optó por un perfil similar al del hoy titular de la SAGARPA, cuando fue candidato: exalcalde de la capital, cara fresca, conocida y de buena aceptación de 48 años de edad.

 

El PRI repetía el perfil: el alcalde de la capital queretana de 47 años al día de la elección, de gran trayectoria en el servicio público y partidista. Sin embargo, carecía de la popularidad de su rival.

 

Esta es la elección donde ambos partidos eligieron perfiles similares y por 58,758 votos triunfó el carismático panista.

 

En Colima se dio la elección más cerrada, y al igual que en Querétaro, ambos partidos (PAN y PRI) escogieron perfiles muy similares: el priísta José Ignacio Peralta de 45 años y el panista Jorge Luis Preciado de 42 años. Ambos con arraigo y trayectoria, eran perfiles tan del agrado del electorado que el priísta ganó por un pelo: sólo 503 votos de diferencia a su favor. Aquí juventud contra juventud dieron una buena batalla.

 

En Michoacán se libró una guerra entre tres candidatos: El PRI con Ascensión Orihuela de 63 años y el PAN apostó Luis María Calderón de 58 años, por el lado de la madurez. Mientras que por la juventud, estaba el perredista Silvano Aureoles de 49 años.

 

Los michoacanos abrumadoramente eligieron juventud sobre la madurez.

 

En el estado de Guerrero, el PRI optó por un cuadro probado y lo recicló como candidato a gobernador diez años después: Héctor Asutdillo de 56 años y dos veces alcalde de la capital. Su rival más fuerte, del PRD, fue la joven Beatriz Mójica de 42 años quien hizo un papel decoroso como candidata, sin embargo el pueblo guerrerense votó por la madurez.

Finalmente, en el precioso estado de Campeche, el PRI le dio la oportunidad al famoso ex líder de las juventudes priístas a nivel nacional, ex senador, ex diputado federal y ex presidente del PRI en su estado: el popular Alejandro Moreno de 40 años de edad. Mientras el PAN escogió como su carta a al ex alcalde de Ciudad del Carmen y ex diputado federal Jorge Rosiñol de 56 años, el maduro de la contienda.

 

Los campechanos votaron abrumadoramente por la juventud del priísta.

 

De 9 gubernaturas en disputa, la madurez ganó en 4 y la juventud en 5.

 

Por lo que podemos observar que decir que los candidatos maduros no son rentables es una falacia, al igual que decir que se debe privilegiar la juventud: hay que investigar bien qué es lo que quiere el electorado.

 

Para los partidos, el balance es el siguiente:

 

El PRI perdió con candidatos jóvenes en Nuevo León, Baja California y Querétaro. Lo que lleva a replantear al PRI si candidatos jóvenes son su opción para el 2016 en Sinaloa, Chihuahua, Durango y Tamaulipas, dado que fueron los jóvenes los que no lograron los triunfos para gobernador el pasado 7 de junio.

 

El PAN tuvo en sus candidatos perdedores más competitivos en Colima y San Luis Potosí, quienes equilibran madurez y juventud respectivamente. Así como no hay una constante entre los que ganaron, sino un balance, puesto que en Baja California Sur ganaron con un maduro y en Querétaro con un joven.

 

El electorado de esos 9 estados, está equilibrado, pues, ganando por un pelito, la juventud.

 

¿Qué decidirán PRI y PAN para Chihuahua? ¿Juventud o madurez?

 

ULTIMALETRA

Descanse en paz el Partido del Trabajo.

luisruben@plandevuelo.mx

 

todos

3 Replies to “2016: ¿Madurez o juventud? Por Luis Rubén Maldonado Alvídrez”

  1. Uno de los problemas estriba en determinar a que edad se les denomina
    «jóvenes». Me resisto decirle joven a un hombre de 49 años y a una mujer
    de 45. Coincido, son otras cosas las que determinan el favor del
    electorado, por ejemplo, el perfil de los electorados
    de cada partido. El del PRI ya está muy definido: pobre, de zonas
    marginadas, de bajo nivel educacional y de 40 años en adelante. Por ahí
    debe explorarse lo que pide Luis Rubén

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