.:ULTIMALETRA ES IMAGEN:.

Por Luis Rubén Maldonado Alvídrez
Por Luis Rubén Maldonado Alvídrez

 

 

Cinthia Aideé Chavira Gamboa quizás es un nombre para que muchos simplemente no suena, pero por ello no deja de ser interesante. Si le agregamos su apellido de casada, para muchos, se hace la conexión inmediata: es la esposa del candidato del PAN, Javier Corral Jurado.

 

Es una mujer discreta, siempre detrás de su marido. Y como lo confesó en la entrevista realizada por El Heraldo de Chihuahua el lunes 11 de abril del año en curso, dentro de la serie “Las damas en la campaña”, es una mujer sensible y, definitivamente, muy comprometida. Eso lo puedo afirmar con conocimiento de causa. En el papel en que la conozco, de periodista, me consta su sensibilidad y compromiso con las causas en las que cree.

 

Siempre ha sido una dama muy accesible. No hay ocasión que no conteste el teléfono o se reporte pronto. Además su pasión por los animales, en especial los gatos, es algo que presume y que muchos seguidores le acarrea.

 

Sus causas se convierten en activismo muy pronto. Con tesón y mucho trabajo pronto suma adeptos y suma esfuerzos con mucha sencillez, misma que a pesar de los cargos que ha ocupado su marido, nunca ha perdido.

 

Tiene un buen ánimo dentro del medio periodístico, gracias a su facilidad para hacer amigos y a su buen trato. Es una excelente publirrelacionista y a eso le debe mucho su esposo.

 

Cinthia es sin duda un gran activo del PAN. Por lo que no me explico porqué en ese partido, no ha tenido un rol más protagónico, teniendo habilidades y capacidades para tener una carrera política exitosa.

 

Desde que Javier Corral irrumpió en el escenario político local, en los tiempos de Francisco Barrio, según narró en la entrevista referida líneas arriba, sin duda el mismo Corral se percató del potencial de su ahora esposa, sin embargo no concibo cómo no la ha impulsado a crecer dentro de la nomenclatura panista estatal o nacional.

 

Javier Corral, siendo ahorita el candidato con menor aceptación y peor percepción (según estudios demoscópicos públicos) se ha de arrepentir por no haber impulsado a su esposa a ser regidora, diputada local o hasta diputada local. De haberlo hecho, Cinthia sería un gran imán de votos para la perdida causa corralista.

 

Incluso serían una pareja a la par de los Calderón Zavala (un caso muy atípico en la política) donde ambos tendrían capital político propio y no tendrían todos los huevos en la misma canasta.

 

Incluso para esta campaña, creo Corral no ha aprendido del error de la pasada: él no haberle dado un rol más protagónico a su esposa, le costó muchos votos.

 

Hoy, a pesar de lo que parece será una debacle panista en la elección de gobernador, Cinthia puede ser el arma secreta que le ayude a ganar votos.

 

ULTIMALETRA

40% del padrón en esta elección tiene entre 18 y 35 años. El voto de los jóvenes definirá, sin duda, a los ganadores. De ahí la definición de Lucía Chavira por un buen perfil como su suplente: Avril Gómez.

luisruben@plandevuelo.mx

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