Punta Cana, República Dominicana.- El pasado 5 de mayo arrancaron las actividades de la XXII Cumbre Mundial de Comunicación Política con las ponencias inaugurales, entre las que se destacó la realizada por la leyenda de la consultoría política: la mexicana Gisela Rubach, quien cuenta con más de 400 campañas en su palmarés político y es la pionera del marketing político en México. En esta edición de la Cumbre Mundial de Comunicación Política presentó su ponencia: Metaestrategia; ya no es adaptarse, sino anticiparse” con la que se robó la jornada inaugural del evento más importante de la comunicación política.
Rubach reveló que este concepto de metaestrategia lo ha manejado desde el 2020, cuando lo presentó en un foro multitudinario y recibió críticas por ello; actualmente su concepto ha tomado vida propia y más vigencia qué nunca.
¿Qué es la metaestrategia?
Es este mundo que, con la irrupción de la inteligencia artificial y del big data, es llegar poner orden al caos digital. Rubach los llama los metaestrategas, la evolución de los estrategas políticos, pues quienes no entiendan que la inteligencia artificial y el big data llegaron se instalaron en todas las facetas de las campañas políticas, pues van a quedar obsoletos, no en años, sino en segundos.
“Seguirá el poder que se está generando con la inteligencia artificial y con el big data y nos vamos a dar cuenta que el poder se está diseñando y se está programando en una esfera y en un campo. Que a la mejor ahorita ustedes van a decir es un mundo virtual, que a nosotros aquí todavía nos falta mucho tiempo. Estamos peleándonos por el gran tema de la economía, del conocimiento. ¿Y dónde creen ustedes que está la guerra? ¿En este momento? La guerra está en la economía de la atención”, argumentó Gisela Rubach ante el salón principal del centro de convenciones del hotel Hard Rock Punta Cana.
Hay peligros en estos avances híper rápidos que aceleran procesos, como los de la comunicación: “¿Cuál es el peligro y hacia dónde vamos y hacia dónde estamos? Estamos en un mundo que no sabemos cuál es la realidad porque el algoritmo es quien nos maneja la realidad”. Y de ahí expuso con total claridad y contundencia los peligrosos y poderosos alcances de los deep fakes.
Y mientras explicaba proyectaba algunos ejemplos. Un deep fake es una forma de manipulación digital en la que se crea un video, audio o imagen falso que parece muy real, pero que en realidad ha sido alterado o generado con inteligencia artificial. Por ejemplo, puede mostrar a una persona diciendo cosas que no dijo o haciendo cosas que nunca hizo. Es como si se «pintara» con tecnología muy avanzada una imagen o escena que no existe en la realidad. Por eso, los deep fakes pueden engañar a las personas, haciendo que creen en información falsa que parece auténtica.
“La llegada la inteligencia artificial, el uso y el abuso de la inteligencia artificial va a dominarlo casi todo. Para el año 2050, donde prácticamente la inteligencia artificial va a dominar, todo va a llevar a la posibilidad de que el promedio de vida llegue a 125 años por ahí de entre el 2042 y 2050. Ya no vamos a necesitar de vacas, borregos, nada, porque toda la carne que vamos a a consumir va a ser 100% sintética, vamos va a llegar a Marte y para mí lo más preocupante, es lo que yo estoy pronosticando para el 2050: Esto que se llama el transhumanismo institucionalizado. Es decir, que seremos mitad robots y mitad seres humanos; muchos de ustedes se van a acordar de esto que les dijo esta vieja loca”, finalizó para arrancar aplausos de las y los presentes oriundos de 25 países.
Gisela, una vez más demostró un liderazgo visionario.
Por Luis Rubén Maldonado Alvídrez
