La palabra Halloween es usada como tal por primera vez en el siglo XVI, y proviene de una variación escocesa de la expresión inglesa “All Hallows’ Even” (también usada “All Hallows’ Eve”) que significa «víspera de todos los Santos».
Halloween tiene su origen en una festividad céltica conocida como Samhain, que deriva del irlandés antiguo y significa fin del verano. Los antiguos britanos tenían una festividad similar conocida como Calan Gaeaf. En el Samhain se celebraba el final de la temporada de cosechas en la cultura celta y era considerada como el «Año nuevo celta», que comenzaba con la estación oscura.
Los antiguos celtas creían que la línea que une a este mundo con el Otro Mundo se estrechaba con la llegada del Samhain, permitiendo a los espíritus (tanto benévolos como malévolos) pasar a través. Los ancestros familiares eran invitados y homenajeados mientras que los espíritus dañinos eran alejados. Se cree que el uso de trajes y máscaras se debe a la necesidad de ahuyentar a los espíritus malignos. Su propósito era adoptar la apariencia de un espíritu maligno para evitar ser dañado. En Escocia los espíritus fueron suplantados por hombres jóvenes vestidos de blanco con máscaras o la cara pintada de negro.
El Samhain también era un momento para hacer balance de los suministros de alimentos y el ganado para prepararse para el invierno. Las hogueras también desempeñaron un papel importante en las festividades. Todos los otros fuegos se apagaban y en cada hogar se encendía una hoguera en la chimenea. Los huesos de los animales sacrificados se lanzaban a la hoguera.
Otra práctica común era la adivinación, que a menudo implicaba el consumo de alimentos y bebidas, e incluso en Asturia se celebraban banquetes en las tumbas de antepasados.
En 1840 esta festividad llega a Estados Unidos y Canadá, donde queda fuertemente arraigada. Los inmigrantes irlandeses transmitieron versiones de la tradición durante la Gran hambruna irlandesa. Fueron ellos quienes difundieron la costumbre de tallar los jack-o’-lantern (calabaza gigante hueca con una vela dentro) , inspirada en la leyenda de “Jack el Tacaño”.
Sin embargo, la fiesta no comenzó a celebrarse masivamente hasta 1921. Ese año se celebró el primer desfile de Halloween en Minnesota y luego le siguieron otros estados. La fiesta adquirió una progresiva popularidad en las siguientes décadas.
La internacionalización de Halloween se produjo a finales de los años 1970 y principios de los 1980 gracias al cine y a las series de televisión. En 1978, se estrenaba en Estados Unidos y en el mundo entero Halloween, de John Carpenter; una película ambientada en la víspera de Todos los Santos que supuso una referencia para el cine de terror de serie B; con innumerables secuelas e imitaciones
Me resulta realmente patético ver como nutrido grupo de gente, sobre todo padres de familia a quienes les parece sumamente divertido disfrazar a sus críos de brujas (os), pero sin faltar misa los domingos, que ironía, dichas personas, defienden a capa y espada el halloween diciendo “la celebración de halloween es extranjera pero la navidad también”, comenten la osadía comparar el halloween con la navidad, sin temor de rayar en lo exagerado pero que barbaridad de comparación; el objeto de celebración de navidad es sagrado y UNIVERSAL para todos los que profesamos la fe católica y cristiana, y lo es precisamente el nacimiento de Jesús, no así el halloween que su objeto inicio como algo en teoría bueno, sin embargo se ha distorsionado al extremo de que la celebración son las brujas, fantasmas, calabazas, etc; quien se atreva a decir que las brujas es lo mismo que navidad, que no tenga la hipocresía de pararse en misa los domingos.
Actualmente y desgraciadamente los infantes airadamente y con una gran sonrisa en la cara exclaman “ celebramos el dia de brujas”, presenciando la aberración tal que entonces a las brujas hay que celebrarles, me invade la consternación, por los niños, si, pero mas me estresan los Padres de esos niños que permiten e incluso motivan esas celebraciones, PADRES POR FAVOR , pueden considerar que sus niños se ven hermosos con sus disfraces, pero que les están enseñando según mi muy humilde punto de vista es que al igual como se celebra el nacimiento de Jesús, también hay se festeja a las brujas, fantasmas, entes paranormales, verdaderamente me produce hilaridad ver como las familias decoran sus hogares con globos y objetos luminosos en forma de fantasmas, brujas y entes por el estilo; y en un mes mas, colocan pesebres, pastores y los llenan de luces; entonces que están observando los niños a sus padres el 31 de octubre colocando en el patio fantasmitas con luces y en quince días mas colocamos el pesebre y al niño dios, cuando bien nos va, por que regularmente cambian por renos, regalos y Santa Claus.
Es tan sencillo culpar al gobierno, a Cesar Duarte, a Peña, Calderón, y hasta a Guadalupe Victoria por las desgracias del país, que si homicidios a mas no poder, desapariciones, e infinidad de crímenes y violencia, pero el 31 de octubre no puede faltar los padres incluso mas emocionados que los propios hijos celebrando las brujas, los fantasmas, y demás personajes de las películas de terror. El gobierno tiene gran parte de la responsabilidad para con la población; empero los padres tiene toda la responsabilidad para con sus hijos de enseñarles lo bueno, y padres de familia por favor que alguien me compruebe que halloween es lo bueno, que las brujas y los fantasmas es una buena enseñanza para sus chavales.
Espero ver en misa a los padres de familia que gustosos disfrazaron a sus hijos el 31, y no solo espero verlos, espero que con la misma enjundia que disfrazaron a sus niños, con ese mismo entusiasmo los lleven a la iglesia.
Comentarios: Fabiola@plandevuelo.mx