EN PLAN DE VUELO
El Día Mundial de la Salud, celebrado el pasado viernes 07 de abril, fecha en la que se conmemora el aniversario de la fundación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1948, organización que año con año elige para esta fecha un tema que realce un tópico de interés para la OMS. El tema de este año fue la depresión.
Según las últimas estimaciones de la OMS, más de 300 millones de personas en el mundo viven con depresión, siendo esta la principal causa mundial de discapacidad y contribuye de forma muy importante en el incremento de las cifras de morbilidad, toda vez que en el peor de los casos, la depresión puede llevar al suicidio, o conllevar conductas destructivas como las adicciones.
De los países en los que se reportan mayores índices de personas con este padecimiento están: Afganistán, Siria, Libia, Argelia, Yemen, Ruanda y Croacia.
Por otra parte Chile es uno de los países con más alto índice de personas que padecen esta enfermedad, paradójicamente resulta esta nación ser la mejor para vivir de América Latina, según el índice de desarrollo humano de la Organización de las Naciones Unidas
Cabe mencionar que México se encuentra entre los países con menor depresión ya que ocupa México ocupa el lugar número 21 de un estudio de felicidad realizado por la ONU en 2016, en el que se analizaron a 156 países. Siendo de los primeros lugares Dinamarca, Suiza, Islandia, Noruega, Nueva Zelanda, Australia y Suecia
En México, aproximadamente 10 millones de personas padecen depresión, de las cuales al menos una quinta parte desarrolla etapas crónicas de la enfermedad.
La OMS reportó que la depresión es la primera causa de discapacidad laboral y México, según la Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica forma parte de los países con mayor aparición de enfermos clínicos con dicho padecimiento, no obstante en el ordenamiento laboral mexicano ( Ley Federal del Trabajo) no existe una figura propia y definida que permita identificar a los empleadores los casos de depresión.
Por ello esta enfermedad suele ser motivo común para baja laboral, ya que a las personas que la padecen, los tachan de holgazanes e improductivos, ya que este padecimiento no presenta síntomas tan comunes, por invocar un ejemplo como un resfrío ( escurrimiento nasal, tos, voz ronca), muchas veces la persona deprimida se torna aislada e improductiva, constantemente se equivoca en sus quehaceres y es juzgada injustamente como “ bueno para nada” sin que se reparare por un instante en que puede estar enferma.
Estimo sumamente favorecedoras y loables las acciones emprendidas por estados como Jalisco, en el cual, dentro del marco de la conmemoración del Día Mundial de la Salud, lanzaron una campaña contra la depresión, constituyendo el propósito de esta campaña anual, (misma que comenzó desde el 10 de octubre del pasado año), es que un número cada vez mayor de personas con depresión, pida y obtenga ayuda.
Criterios que resalto de la citada campaña son los siguientes: “Este padecimiento se genera principalmente por la violencia, intolerancia y frustración en niños y jóvenes, dado que la cantidad de satisfactores materiales son cada vez mayores, y la felicidad la basan en ello. Uno de los principales motivos de depresión es la disolución de las familias, ya que cinco de cada 10 matrimonios terminan en divorcio antes de los 10 años”, así lo externó la titular en ese Estado del Departamento de Promoción y Prevención en Salud Mental.
En este orden de ideas, la OMS expone que más de la mitad de los afectados en todo el mundo no recibe los tratamientos adecuados para enfrentar la depresión ya sea por la falta de recursos y de personal sanitario y/o medico capacitado, además de la estigmatización de los trastornos mentales y la evaluación clínica inexacta o bien, diagnósticos erróneos que conllevan tratamientos con antidepresivos completamente innecesarios.
La depresión es una de las afecciones prioritarias para la aludida Organización Internacional, dentro del Programa de acción para superar la brecha en salud mental (mhGAP) de la OMS, cuyo objetivo consiste en ayudar a los países a ampliar los servicios para personas con trastornos mentales, neurológicos y por consumo de sustancias mediante la prestación de la asistencia por profesionales sanitarios que no son especialistas en salud mental.
Este Programa parte del principio de que con una atención adecuada, ayuda psicosocial y medicación, decenas de millones de personas con trastornos mentales, entre ellos la depresión, podrían tener una vida normal, incluso en entornos con escasos recursos
Considero que no es dable preciarse de ser una persona saludable, si éste “buen estado o sensación de bienestar “ es producto de la ingesta continua o desmedida de fármacos; estimo que las personas sanas son aquellas que están bien sin depender ni del omeprazol ni del ketorolaco ni mucho menos del acido acetil salicílico. Ser los mejores amigos del TAFIL (ALPRAZOLAM), estimo que no resulta ser del todo benéfico saludablemente hablando, dejar en manos de estos fármaco mi estabilidad y salud mental, dependiendo íntegramente mi sensación de bienestar de si me tomé mi píldora o no.
Me es claro que existen situaciones de sumo desconsuelo en la vida del ser humano que es menester una ayudadita química, no obstante lo nocivo es cuando cómodamente queremos que las pastillas resuelvan nuestros problemas o por lo menos que sigan ahí pero no que no nos duelan y nos estancamos en esta “ comodidad” en vez de tomar el toro por los cuernos, hace frente a la situación y aprovechar el impulso que nos puede brindar ciertos fármacos para salir del atolladero y continuar por nosotros mismos.
Acciones para un camino saludable y por ende una vida lonjeba y plena, a mi humilde consideración, lo son realizar ejercicio de forma continua, y no hablo de gastarnos cuantiosas sumas en un gimnasio, hablo de media hora de caminata; evitar o disminuir las comidas y bebidas chatarra; reírnos, de lo que usted guste pero ríase, tomar con tranquilidad aquellas situaciones estresantes de nuestra vida, se obtienen mejores soluciones para ellas estando calmado que con los pelos de punta; y la tradicional “ respira profundo y cuenta hasta 10”
Sinceramente considero estas acciones más beneficiosas que cualquier píldora, y las elementales para prevenir los mortales estragos que causa el estrés.
Evidentemente si usted tiene una dolencia, no espere que por caminar una semana y contar hasta diez en tres situaciones de su vida, dicha enfermedad no se desaparecerá por arte de magia, este camino saludable es un estilo y una filosofía de vida, se empieza a practicar y al principio, similar a las rutinas de gimnasio.
Le va a costar mucho trabajo no querer estallar en cólera como otras veces, evitar refunfuñar y recordarle hasta los tatarabuelos a las personas, pero poco a poco le va a costar menos no reaccionar enojado, no lamentarse por su situación, y en automático casi como la respiración lo tendremos respirando profundo, contando hasta el millón si usted gusta, pero fuera de las garras mortíferas del estrés, los lamentos y las depresiones.
Por lo anterior concluyo que el precio de la salud, es el valor que le demos a cada situación que nos enfrentamos en nuestro día a día, si me engancho, si reacciono con negatividad, si maldigo, si vivo constantemente en un estado de cólera, de tristeza, de rencor, ello no va a acarrear más que enfermedades, que con dinero pretenderé solucionar algo que puede evitarse con mis decisiones y estilo responsable de vida.
ESCALAS
- Aprovecho este espacio y tema el que abordo con conocimiento de causa, ya que mi padre quien en días pasados celebró su octogésimo quinto aniversario de vida, me sobran dedos de una sola mano para contar las píldoras que toma al día, eso sí, que no le falte su ejercicio diario, sus frutas y sus películas de Cantinflas. Gracias padre, por ser ejemplo de una vida saludable, plena y feliz.
- Gracias por sus comentarios. No deje de escucharme todos los miércoles a las 9 de la noche en el 102.5 FM en el programa “Plan de Vuelo”.
- Sígame escribiendo a: fabiola@plandevuelo.mx