Las redes sociales han logrado que las logias masónicas del mundo, pasen de la clandestinidad a la apertura discreta: tienen sus páginas tanto en Facebook, canales en YouTube, seguidores en Twitter y actuvas páginas web donde se puede aprender mucho más de la masonería, algo jamás pensado en antaño-
En España hay entre 3000 y 4000 miembros con una media de 40 años de edad y distribuidos en unas 200 logias –150 consideradas regulares y 50 adogmáticas–. Nada que ver con EE. UU., donde existen cinco millones de masones, Inglaterra, donde son un millón, o Francia, donde hay cerca de 300 000. Y más allá de conservar algunas tradiciones como los símbolos del libro sagrado, la escuadra y el compás en el caso de las logias regulares o las herramientas arquitectónicas en el de las adogmáticas, el misterio y la intriga se desvanecen al primer clic del ratón en la web, donde ya podemos saber mucho más de los masones, que lo que pudieron conocer nuestros antepasados.